Malpensa alejó los fantasmas

Malpensa alejó los fantasmas

Malpensa (FOTO: CAMPANA DE LARGADA)

Por Gustavo S. González
Adrián Giannetti desató el nudo que tuvo en el pecho todo el año y se paró en los estribos de Malpensa un ratito antes de ganar la Copa de Plata-Roberto Vasquez Mansilla. Un nudo que se había armado a puros segundos puestos. Por cabeza, por pescuezo. A veces bien, otras sin merecerlo. Muchas dejando un sabor amargo.
Fue justo en la más difícil. En la carrera en que las yeguas de experiencia, a las que no pudo doblegar, se encuentran con las mejores potrancas. Con esa fenómena llamada Catch the Mad, la mejor 3 años. La que ayer quedó a un cuerpo y medio de cerrar una temporada increíble con la victoria más esperada.
Y si es por legitimar el triunfo de Malpensa con un sello lacrado, allí está la tercera, Ollagua, la campeona adulta de 2009. Una yegua formidable, ganadora de cinco Grupo 1, que ayer viajó en el codo más cerca del fondo que de la punta, para arremeter con furia en el final, abierta claro, y cruzar a medio cuerpo más.
Ante esos prodigios tenía que imponerse Malpensa para demostrar que la suerte es un juego ingrato, pero que no tiene asunto cuando la razón es más fuerte. “Esta vez vino más cerca; largó adelante. Le cambiamos la forma de correr y no había caso. Esta vez y en la anterior -segunda al pescuezo de Semanera- me dieron libertad y ganó a gusto mío.” Ni respira el jockey para contarlo.
Malpensa vino cuarta de Aicega, pegada a Catch the Mad, que fue la primera en asomar al frente a poco de desandar el derecho. “A Malpensa no hay que apurarla; enseguida supe que a la potranca la tenía cocinada, pero me preocupaban las de afuera”. Faltaban 150 metros cuando la yegua de Santa Inés dominó. Catch the Mad, pura clase, resistió un trecho. Ollagua no alcanzó.
“¿Viste cómo lloraba? Con Juan [Udaondo] trabajamos mucho y la gente de Santa Inés es de primera”, explica el desahogo Giannetti. Ni esperó a bajar de la montura. El año había sido demasiado largo.
Misserocchi se sacó la espina
Algo más que sacarse una espina fue el éxito de Malpensa para Sandro Misserocchi. “Siempre pensamos que es una gran yegua. Juan Udaondo trabajó mucho y sólo esperábamos que se mantuviera sana, que su carrera iba a llegar”, comentó el criador de Invasor, tras el primer Grupo 1 de Santa Inés.
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