18 Oct EJECUCION DE LA ESTRATEGIA: Balanced Scorecard
Uno de los grandes déficits que pueden observarse en el mundo corporativo pasa por la estrategia y varios de sus aspectos vinculados. Dificultades en su correcta planificación, serios inconvenientes a la hora de su implementación, diversos problemas relacionados con su eficiente comunicación y consecuentes falencias en el compromiso de los empleados y hasta de los dirigentes con el plan, son algunos de ellos.
Aun hoy en día el inadecuado manejo de ciertas cuestiones emparentadas con la estrategia es un defecto recurrente y difícil de erradicar.
Con la intención de contrarrestar algunos de estos defectos ganó la escena una técnica que saltó las barreras del anonimato bajo el nombre de Balanced Scorecard. Básicamente esta herramienta ayuda a las organizaciones a poner en acción su estrategia, además de hacer las veces de elemento de medición para mostrar cuando se alcanzan los resultados perseguidos. El método posibilita calificar las actividades de acuerdo a su propia visión, permitiendo a los administradores contar con una amplia mirada sobre las prestaciones del negocio.
La creación de Robert Kaplan y David Norton, el Balanced Scorecard, es un sistema de administración que va más allá de la perspectiva financiera. El Balanced Scorecard es una herramienta para movilizar a la gente hacia el pleno conocimiento de la misión, a través de canalizar las energías, habilidades y conocimientos específicos del recurso humano de la organización hacia el logro de metas estratégicas de largo plazo. Permite tanto guiar el desempeño actual como acompañar el desempeño futuro. El Balanced Scorecard usa medidas en cuatro categorías —desempeño financiero, conocimiento del cliente, procesos internos de negocios y aprendizaje y crecimiento- para alinear iniciativas individuales, organizacionales e interdepartamentales, e identifica procesos enteramente nuevos para cumplir con los objetivos.
PERSPECTIVAS
El Balanced Scorecard sugiere que se vea a la organización desde cuatro perspectivas, cada una de las cuales debe responder a una pregunta determinada. En el caso, por ejemplo, de la óptica del beneficiario de una Obra social, el interrogante debe ser ¿como nos ven nuestros beneficiarios? Mientras que en lo referido a la interna de la organización, el eje pasa por saber ¿en que debemos sobresalir? Las otras dos preguntas son ¿podemos continuar mejorando y creando valor? (innovación y aprendizaje) y ¿Cómo nos vemos a los ojos de los prestadores y la autoridad de aplicación?, para la óptica financiera.
Se pretende que el verdadero aporte del sistema sea la concientización sobre el tema de la gestión estratégica, su descripción, poder ponerla en un papel y por supuesto en la medida de lo posible medirla o cuantificarla.
POSIBLES APORTES DEL Balanced Scorecard
Los creadores de este método aseguran que el mismo sirve para formular una estrategia consistente y transparente; comunicarla a través de la organización; coordinar los objetivos de las diversas unidades organizativas; conectar los objetivos con la planificación financiera y presupuestaria, identificar y coordinar las iniciativas estratégicas y medir de un modo sistemático la realización, proponiendo acciones correctivas oportunas.