03 May El 2010 deber ser el de la transición hacia un nuevo modelo de gestión
Los diagnósticos son muchos. Sobran las explicaciones acerca de las causas que continúan llevando a un estado crítico a nuestra actividad del turf.
Las respuestas sostenidas por los melancólicos recuerdos de un pasado de gloria que, lamentablemente, no coincide con la realidad actual, no son útiles. Creo que ha llegado el momento de pensar en soluciones que puedan ser realmente aplicables, de carácter integral, surgidas del consenso del conjunto de todos los actores, que involucren a todos los protagonistas del sector.
Hoy, las condiciones generales de la actividad turfística -así como las particulares de cada Jockey Club o hipódromo- exigen el diseño y la aplicación de un modelo de gestión distinto y de cara a estos nuevos tiempos. Éste no debe estar apoyado en el sentimentalismo ni la nostalgia sino que debe estar basado en los sólidos pilares de una administración profesional que comprenda la problemática para así lograr las soluciones requeridas.
No solo hay que buscar la eficacia, sino también la eficiencia, y mucho más aún, la excelencia, en donde los recursos sean nuevamente volcados al desarrollo del sector. Todos debemos encontrar la fórmula para tratar de evitar los intermediarios que retengan los recursos producidos. Impedir que los mismos alimenten un sistema cada vez más concentrado, como resultado del vaciamiento del interior del país.
Desde la UTTA Convoco a todos a tratar de diseñar el camino que la actividad se merece. Esperemos poder lograrlo.
Carlos Felice