George R.R. Martin: “Este nivel de fama es algo que nunca esperé ni anticpé”

George R.R. Martin: “Este nivel de fama es algo que nunca esperé ni anticpé”

Por Alberto Rojas Moscoso
No todos los días se cierra un negocio por mil millones de dólares. Eso fue lo que le costó a Mark Zuckerberg, creadory CEO de Facebook, comprar Instagram. Sin embargo, cuando estaban por cerrar el acuerdo el joven multimillonario le pidió a Kevin Systrom, cofundador de la popular red social de fotos, interrumpir las negociaciones. ¿La razón? Zuckerberg no quería perderse un episodio estreno de Game of Thrones (Juego de tronos). Y se instaló a verlo junto a sus amigos.
Ése es el tipo de fanatismo que despierta en todo el mundo esta serie de HBO [la presidenta Cristina Kirchner se declaró igualmente fanática por medio de su cuenta en Twitter] que va por su tercera temporada. Más de nueve millones de estadounidenses vieron la primera (2011), que costó US$ 60 millones. La segunda (2012) registró 25 millones de descargas ilegales en Internet, convirtiéndola en la serie más pirateada de la historia. Y el primer capítulo de la última temporada promedió 4,4 millones de espectadores sólo en Estados Unidos. A eso se suman ocho premios Emmy, un Golden Globe y nada menos que otras 45 nominaciones.
Sin embargo, este éxito que combina un elenco mayoritariamente británico, imponentes escenografías y una trama llena de giros le debe todo a un solo hombre: George R. R. Martin, el creador de Canción de hielo y fuego, la saga literaria en la que se basa la serie. Una fantasía épica para lectores adultos, cargada de violencia y luchas de poder entre las casas que se disputan el Trono de Hierro, y donde ningún personaje parece tener garantizada su permanencia.
“Apenas se emitió el primer episodio de la tercera temporada, HBO la renovó por una cuarta y de inmediato nos pusimos a trabajar en ella. David Benioff y Daniel B. Weiss [guionistas y productores de la serie] ya están viendo los nuevos episodios, al igual que yo. Las filmaciones comenzarán en junio o julio”, confirma Martin -con su voz grave y hablar pausado- por teléfono desde Santa Fe, Nuevo Mexico, donde vive junto a su esposa, Parris McBride, y cuatro gatos.
Inspirada en la Guerra de las Dos Rosas, el conflicto que enfrentó entre 1455 y 1485 a la Casa de los Lancaster con la Casa de los York por el trono de Inglaterra, la saga de Martin hoy se extiende a lo largo de cinco volúmenes editados por Random House Mondadori: Juego de tronos, Choque de reyes, Tormenta de espadas, Festín de cuervos y Danza de dragones. De ellos se han vendido más de 20 millones de ejemplares en todo el mundo y están traducidos a 40 idiomas.
Y todavía restan dos libros más y un número no definido de temporadas.
-¿Cuáles han sido los principales desafíos de adaptar sus libros a la televisión?
-Las novelas son bastante difíciles de filmar por varios aspectos. Son muy extensas y complicadas, con muchos personajes, castillos, batallas, dragones, lobos huargos y tramas paralelas que, además, se entrelazan. Tuvimos que eliminar algunos personajes, cosa que yo detesto hacer, pero entiendo que era necesario. Sólo tenemos diez horas por cada temporada; sería mucho mejor si fueran doce, pero contamos con un gran presupuesto comparado con otras series de televisión. Considerando nuestros recursos, lo hemos hecho muy bien.
-En cada temporada usted escribió un episodio. ¿Cuál elegirá ahora?
-Ya sé qué episodio voy a escribir, pero no tengo la libertad de revelarlo.
-Entiendo que, aparte de usted, sólo HBO conoce el verdadero final de Canción de hielo y fuego.
-A Dave y a Dan les dije hacia dónde voy, ellos tienen las líneas generales, pero todo está en mi cabeza.
-La actual temporada equivale a la primera mitad de su tercer libro, Tormenta de espadas. ¿Cuántas temporadas se necesitarán para sus siguientes novelas, Festín de cuervos y Danza de dragones?
-Bueno, esa decisión todavía no ha sido tomada. Mi esperanza es que sean dos temporadas en las que podamos combinar Festín de cuervos y Danza de dragones, considerando que son libros cuyas tramas ocurren en forma paralela. Estamos hablando de la quinta y sexta temporadas, incluso de la séptima. Pero primero tenemos que terminar la cuarta y esperar a que renueven la serie.
-En este momento usted trabaja en la próxima temporada de la serie, hace giras para promocionar Danza de dragones, edita antologías y además escribe el sexto libro. ¿Cómo se organiza para trabajar en tantos proyectos?
-[Se ríe] Sí, es mucho trabajo. Y por desgracia llevo este ritmo desde hace cinco o seis años. Todo se fue volviendo como una bola de nieve. Se me fueron presentando oportunidades para otros proyectos y dije que sí a todos; probablemente fueron demasiados. También me gusta viajar a diferentes partes del mundo para conocer a mis lectores, ir a convenciones y a firmas de libros. Y dije que sí a varios de ellos. Me encanta, pero es difícil viajar. Por eso, actualmente intento abordar cada proyecto de a uno. Y al mismo tiempo, estoy tratando de aprender a decir que no.
-Imagino que ya odia esta pregunta, pero ¿cómo va el sexto libro, The Winds of Winter?
-No voy a hacer ninguna predicción. Estoy trabajando en él, estoy haciendo progresos, pero es un libro grande. Definitivamente no estará listo para este año, tal vez lo publique el próximo. Pero para mí es un paso a la vez, trato de enfocarme en cosas pequeñas como terminar un capítulo o una página.
-¿Por qué Tyrion Lanister, a quien interpreta Peter Dinklage, es su personaje favorito?
-Es entretenido escribir sobre él porque es un personaje de mucha pro¬fundidad, lleno de contradicciones y de gran inteligencia. Pero también tiene sus propios demonios con los que lidiar; tiene un lado oscuro. Escribir sobre un personaje de gran profundidad y complejidad como él es mucho más fácil que trabajar con un personaje que siempre es bueno o siempre es malvado.
-En marzo, durante la gala de Game of Thrones en el Teatro Chino de Hollywood, dijo que estaba interesado en escribir más de estas novelas.
-Siempre estoy tratando de escribirlas entre los libros de Canción de hielo y fuego. Mi intención es escribir una serie de novelas cortas de Dunk y Egg. Ahora está por editarse una compilación de las tres primeras, que originalmente fueron publicadas en diferentes antologías. ¿Una cuarta o quinta novela? Probablemente tenga suficiente material para diez o doce de éstas, pero tendremos que esperar hasta terminar The Winds ofWinter.
-¿Ha considerado escribir novelas sobre la juventud de Robert Baratheon y Eddard Stark, personajes clave del primer libro de la saga?
-No, no realmente [risas]. Eventualmente podría escribir más novelas ambientadas en Poniente [o Westeros], pero no sobre ese tema en particular. Yo creo que eso ya está cubierto adecuadamente en los libros de Canción de hielo y fuego a través de los flashbacks y las conversaciones de los personajes. Hay otros períodos de la historia de Poniente, cientos de años antes, y otras tierras en el mundo que he creado, sobre los cuales me gustaría escribir.
-¿Cómo ha cambiado su vida con el éxito de las novelas y de la serie de televisión?
-Mi vida ha cambiado de manera positiva, pero también negativa. He sido un escritor exitoso por mucho tiempo y estuve muy cómodo con la forma en que vivía mi vida. Pero las cosas han cambiado y este nivel de fama es algo que nunca esperé ni anticipé. De hecho, todavía me resulta difícil asumirlo. Estoy acostumbrado a dar entrevistas, a hablar en público, a aparecer en diferentes eventos, pero ahora hay gente que golpea la puerta de mi casa, el teléfono suena todo el tiempo, ya no puedo salir al cine o a comer porque la gente me reconoce y me pide sacarse fotos conmigo o autógrafos. Esto te afecta.
-Sus primeras novelas fueron de ciencia ficción e incluso de terror. Pero fue su saga de fantasía la que lo volvió famoso a escala mundial. ¿Cuál es su género favorito?
-Me gustan todos ellos. Crecí leyendo ciencia ficción, fantasía, terror. En mi mente son todos diferentes sabores de una misma cosa. William Faulkner, gran escritor y ganador del Premio Nobel, una vez dijo: “La única cosa sobre la que quiero escribir es sobre el corazón humano y los conflictos consigo mismo”. Y eso siempre lo he considerado mi mantra. Por eso escribo, no importa si en mi mente hay un dragón o una nave espacial, una lucha con espadas o armas láser o vampiros. Todavía son los personajes los que importan, aún se trata del corazón humano y de sus conflictos internos.
LA NACION