La UTTA apostó a ganar

La UTTA apostó a ganar

Por Alicia Apreda
Empache de domingo burrero a puro sol y alegría se vivió en la Copa Utta de Córdoba. Una trifecta en el bolsillo, la esperanza que a veces le apunta y una concurrencia que baladeó.. “estoy… taaan enaaamorado” con Montaner al eco de la popular, “arriba viejo no másss”.
La campana de largada la dio la firma del convenio marco de apoyo y colaboración entre La Unión de Trabajadores del Turf y Afines (UTTA) y la Federación de Jockey Clubes e Hipódromos del Interior que precedió en un día, a la fiesta monumental que se presenció en el Hipódromo Cordobés, que atesorará por siempre el haber abierto sus puertas como anfitrión.
Este compromiso de aunar voluntades en beneficio del fomento y crecimiento de la industria hípica argentina, selló a la competencia como el mojón para concretar las intenciones en acciones conjuntas de profesionalizar la actividad del turf federal.
El acuerdo corona una planificación estratégica que nació de unas ganas soñadoras de los que creen en un futuro posible.
UTTA y OSPAT, ambas entidades enlazando y confirmando la creencia de que entre todos podemos lograrlo, brindaron su generosidad comunitaria colaborando con agrupaciones sociales que trabajan por grupos vulnerables.
Esperé la carrera recorriendo los boxes, hablando con orgullosos cuidadores, saboreando ese ambiente inundado, para mi, por la nostalgia; extendí mis brazos para abrazar la orfandad de los que sin ellos no se podría disfrutar de este egregio deporte; vestí mis ojos de soles, caras desnudas engalanadas por rayos generosos, palabras humildes, pudorosas, desbordadas con paciente respeto y recibí una instrucción franca a mi curiosidad turbada; desde el campestre paddock me deslumbré con los finos pelajes, con los pura sangre de ojos vivaces y cabezas aristocráticas y me juré formarme porque había nacido en mi un fenómeno esencial de responsabilidad por estos…otros.
“Y se alzaron las cintas…parten los tungos como saeta veloz”…dice el tango enarbolando la colorada. Vamos el 11!! gritaban en las tribunas y Brazilian Beat recostó por ½ pescuezo a Fire Tango coronando su crónica de éxitos y reconoció el hecho de su estrellato de 3 copas UTTA, este pingazo que acumula su 6ta victoria oficial.
Esta competencia hípica que se ha hecho tradicional hinchando las venas de orgullo del turf federal, estalló en una marquesina de color y fiesta de los sentidos. Con la asistencia de un público convocado por un espectáculo de calidad único en sonido y virtuosa musicalidad, su conducción quedó a cargo de la simpatiquísima Paula Chaves y el cancherísimo Diego Romero, quienes coronaron de sueños a la reina del turf.
El atardecer envolvía cálido una jornada popular que apostó a ganador.
Mi jefe me pidió la impresión por esto de ser nueva… y sentí que el sello es la convicción de que la mejor forma de atreverse es inventar el futuro.