Reflexiones a diez años de la primera Copa UTTA

Público en el hipódromo

Reflexiones a diez años de la primera Copa UTTA

Por Carlos Felice

El 1 de marzo de 2009 se desarrolló la primera “Copa UTTA” en el Hipódromo de Gualeguaychú. Y la historia que siguió es bien conocida: recorrimos trece hipódromos del país durante cuatro años produciendo gran impacto, local y nacional.

Cuatro años después, en 2013, decidimos dejar de llevarla a cabo. Las razones las dijimos. Nos dimos cuenta de que, más allá de apoyos declamados y palmadas en la espalda, nadie más estaba dispuesto a contribuir a sostener la iniciativa. No creo que haga falta agregar más.

Sin embargo, sí, cuando vuelvo sobre esos acontecimientos me pregunto si de todo aquello quedó algo realmente. O si simplemente se borró de las mentes, de los lugares, de la vida de las personas que involucramos.

Pienso que la respuesta es compleja. Les comento por qué a continuación.

Carlos Felice: “Queremos que nos visualicen”

En febrero de 2009 nos lanzamos con el proyecto Copa UTTA y estábamos muy ilusionados con los compañeros dirigentes de nuestro gremio UTTA. Ya sobrevolaba una idea sobre todo lo que realizábamos esos años (sigue presente) y era la siguiente: que nos vieran.

¿A quiénes? Al turf federal, provinciano, genuino, con ejemplares equinos de alto valor y calidad, pero también con capacidad propia de organización, con trabajadores del turf provistos de un know how muy calificado sobre la actividad y, sobre todo, junto a un público popular mucho más interesado en la hípica que el de la Capital Federal.

En algún punto, lo que pretendíamos era correr ese velo de subestimación que existe en la mirada del turf centralizado sobre “el interior”. ¿Eso lo logramos? A medias.

Convengamos que esa subestimación sigue bastante presente (después de todo, trasciende la actividad del turf, es más bien atávica, tema mucho más extenso… no?), pero sí, NOS VIERON (más adelante comento algunas pruebas de eso). Y… SE VIERON a sí mismos, se reconocieron con orgullo nuestros compatriotas de las provincias.

Tanto se vieron que dejamos instalada la idea de que era posible movilizarse “en” y “desde” el interior. De hecho, luego surgieron iniciativas similares, torneos con intención federal que también apoyamos con gusto desde nuestro gremio. Es una idea que sigue latiendo.

Aún faltan financiadores, faltan modelos económicos que estructuren eso que está ahí, para ser organizado y potenciado.

Una nueva manera de hacer eventos hípicos

En las redes sociales (nuestras y ajenas) aparecieron en aquella época una especie de puristas del turf que defendían el turf, PERO “sin cambios”.

Nuestra idea era opuesta. Teníamos que repensar por completo los eventos hípicos. Hacer que la juventud nos conociera. Conjugar las carreras de caballos con otras actividades que acercaran a quienes no sabían de qué se trataba la actividad.

Hicimos shows musicales de primer nivel, de rock nacional, de pop, de cumbia, folklóricos, trajimos anfitriones destacados del espectáculo, organizamos ferias artesanales, concursos, convocamos artistas y grupos de danzas locales, exhibiciones de artes plásticas, increíbles acciones solidarias, ideas lindas y divertidas que resultaron en jornadas felices para muchísima gente que atrajimos a los hipódromos del interior.

Afortunadamente, eso impactó y mucho en las mentes de los dirigentes de Buenos Aires.

En aquella época fue revolucionario, hoy es casi natural encontrarnos con eventos hípicos que en Buenos Aires conjugan turf con amenidades de todo tipo. Food Trucks, exhibiciones de automóviles, peloteros y shows para los niños… qué bueno que nuestras ideas dispararon otras tantas. Y sí, había que darle una vuelta a la cosa. Lo hicimos. Perduró.

Memoria

Para la historia dejamos varias cosas.

Por ejemplo, un documental, “Copa UTTA Restauración del Turf Nacional”, que estrenamos con muchísimo público en el cine Hoyts Abasto el 12 de marzo de 2012.

Si bien la Copa UTTA era la excusa, aquel documental profundizaba sobre la crisis del turf desde una pluralidad de voces y los entrevistados imaginábamos soluciones, aportes posibles. También abordaba el debate sobre la vigencia de esta actividad con un punto de vista que, por fin, incluía a los provincianos.

En el recuerdo de Sebastián Cares (jockey fallecido en Neuquén, al golpearse en una gatera) pretendimos poner sobre la mesa la cuestión de las condiciones en las que se desempeñan los compañeros trabajadores hípicos en todo el país.

El documental está allí, público y lo dejamos para la historia de los debates sobre el turf en Argentina. Realmente no sé si hay otros documentales sobre el turf en Argentina. Pero sé que el nuestro fue un aporte valiente, lo hicimos con compromiso y con coraje. No sé cuántas entidades de la hípica pueden decir lo mismo.

Si no lo vieron, recomiendo que lo vean, vale la pena, está en youtube, aquí dejo el link.

Otra: produjimos nada menos que un programa de TV, “Argentinos Pura Sangre”. Además, excelente. Pasaron todos, desde Lito Cruz, a Batistuta, a Felipe Pigna, a Ángel Baratucci, una leyenda.

Les dejo el link a los videos: Argentinos Pura Sangre

Además, mostramos al país nuestros hipódromos, dejamos numerosos registros de video y fotografía. Documentamos en libros las alternativas de la Copa UTTA.

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