Y se armó un Gran Barullo

Y se armó un Gran Barullo

Por Juan Raúl Moncada
Sin dudas fue una gran fiesta el domingo en Las Flores con una concurrencia que superó las 10 mil personas y una recaudación que ascendió a los 308.451 pesos en un hipódromo que lució espléndido desde todo punto de vista, ya que además de la remodelación de la pista, obra del uruguayo José Pedro Cristina, también las tribunas y sus clásicos jardines lucieron muy bien, obra del esfuerzo de un gran grupo de trabajadores comandados por el Dr. Carlos Daniel Felice.

Debutante y ganador
Siete potrillos se alinearon en el palo de los 1.000 en busca del primer clásico oficial de la temporada para los tres años, la cátedra eligió amplio favorito al zaino Bass Line sobre Ángel Luminoso; pero a la hora de la verdad fue el debutante El Gran Barullo el que se vino de punta a punta sin esperar a nadie causando una inmejorable impresión en la pesada local.
Cuando se abrieron las puertas fueron varios los que intentaron tomar la punta, pero enseguida y bien ceñido a la baranda fue Fernando Vilchez el que acomodó adelante a El Gran Barullo, mientras Juan Márquez acomodaba segundo a Ángel Luminoso, quedando Bass Line y Ruby Minor un poco más atrás.
Se metieron en el codo y el puntero cortó luz sobre Ángel Luminoso, mientras Bass Line y Ruby Minor compartían el tercer puesto con el resto más atrás esperando la recta; todo lo que quedaba de codo mostró un cómodo accionar de El Gran Barullo con luz sobre Ángel Luminoso que esperaba su momento.
Se escapa
Pisaron la recta y cuando parecía que el puntero empezaba a quedarse, sobre todo por el avance de Bass Line y Ruby Minor, Fernando Vilchez movió al defensor de las sedas del stud Mario Román y el Halo Sunshine salió como una flecha, estirando nuevas ventajas sobre sus perseguidores que no se le podían arrimar.
De los 200 a la raya resultó un monólogo para el pupilo de Ramón Tavella, mientras que el favorito Bass Line conservó el segundo puesto delante de Ronnie Wood, completando un espectacular 1-2-3 del cuidador Ramón Tavella. El cronómetro se detuvo en el impresionante registro de 1 minuto 48 centésimas y hoy por hoy El Gran Barullo se ha convertido en el mejor potrillo de esta generación que está dando sus primeros pasos.
EL LITORAL