Las empresas ahora buscan en las redes sociales a sus futuros empleados

Las empresas ahora buscan en las redes sociales a sus futuros empleados

Por Ximena Casas
En poco tiempo, las redes sociales lograron cambiar por completo las búsquedas laborales. Del lado de las empresas y las consultoras –los reclutadores– hoy ya son pocos los que recurren a la forma tradicional y la mayoría decide iniciar sus procesos para cubrir puestos en LinkedIn, Twitter e, incluso, en Facebook.
“Las búsquedas y la participación activa de los candidatos convirtieron a las redes sociales en una de las principales fuentes para la búsqueda de empleo”, afirmó Laura Bitocco, gerente General de Hidalgo y Asociados, una de las consultoras asociada a PortalRH.
“Estamos reclutando perfiles profesionales básicamente por LinkedIn. Ahora somos nosotros los que salimos a buscar los perfiles que necesitamos. En el momento de enviar a las empresas los CVs de los candidatos, estamos mandando directamente el perfil de LinkedIn. Las nuevas generaciones que buscan empleo ven a las redes sociales como algo mucho más rápido”, explicó María Sol Tenca, permanent placement concept manager de Randstad Argentina, empresa de servicios en Recursos Humanos.
Las empresas también utilizan las redes sociales para posicionarse como un lugar “deseable” para trabajar. “A través de Facebook se hace mucha marca empleador, donde las empresas se ‘venden’ como una empresa buena para trabajar”, destacó Julieta Rocchietti, gerente de Selección y Consultoría de CONA Consultores RH.
Pero para acceder a estas búsquedas, no sólo es necesario tener un perfil y manejar el lenguaje de las redes sociales: es muy importante que a la hora de iniciar o responder a un pedido para cubrir un puesto laboral, los candidatos respeten ciertas normas y mantengan una comunicación lo más profesional posible.
– Actualizar el CV con frecuencia. “Es común que la gente ingrese a las redes y unos meses después se olvide de donde ingresó. Hay que anotar todas las postulaciones que se han hecho y ver cuáles son las que van saliendo”, destaca Tenca. A los pocos meses de ser publicado, un CV ya puede quedar desactualizado. Además, las consultoras realizan búsquedas por palabras dentro de las bases de datos, por eso es importante tener la información del perfil al día.
– Ser lo más honesto y coherente posible en la presentación de los datos. Las consultoras tienen acceso desde distintas redes a la información de un mismo candidato, por eso hay que evitar incongruencias. “Las fechas deben ser correctas. Prefiero un bache de 3 ó 4 meses en un CV que una mentira. Siempre hay que ser lo más correcto y serio a la hora de armar un CV. Nos importan poco los hobbies pero mucho las funciones que desarrolló el candidato en el último empleo”, señala Rocchietti. Hay que evitar la informalidad y la información tiene que ser prolija, con especial cuidado en la ortografía y en la foto de perfil.
– Ampliar la red de contactos. “Es recomendable aceptar cualquier contacto en LinkedIn, a diferencia de Facebook que se usa para cuestiones más personales”, dice Tenca. Los especialistas también aconsejan armar un listado de todas las consultoras y sumarse a los distintos grupos de profesionales, especialmente los de LinkedIn. “Desde el lugar del postulante, no sólo hay que estar en la red sino también generar una participación activa. En el caso de tener un listado de empresas target en las que se quiera trabajar se puede contactar de manera espontánea a las personas encargadas del área de Recursos Humanos”, destaca Bitocco.
–¡Atención con Facebook y Google! “Es importante saber que los empleadores apelan a estas herramientas para conocer mejor a un candidato. Pueden tomarse algunas medidas preventivas como revisar la configuración de la privacidad en Facebook, crear un perfil personal y otro profesional para no entremezclar información, explorar los resultados de búsqueda de nuestro nombre en Google, por citar algunos ejemplos. No se trata de mentir sobre nuestro perfil, sino mostrar solo aquella información que nos interesa”, precisa Diego Kirschenbaum, director de Capital Humano.
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