21 Apr Río Negro a toda costa
La ciudad de Viedma, capital histórica de la Patagonia, se halla emplazada sobre la margen sur del río Negro, a 30 km. de su desembocadura en el Océano Atlántico. En el curso inferior del río Negro, se encuentra el Balneario El Cóndor, villa turística que cuenta con servicios acordes a las necesidades de los viajeros.
Aguas claras, pacíficas y amplitud de playas son algunos de los atributos que ofrece El Cóndor y todo el conjunto de playas de la costa Atlántica, que son ideales para la pesca. En otoño los deportes de viento tienen su espacio en la práctica del kitesurf, kitebuggy y parapente.
La colonia de loros barranqueros en El Cóndor y los lobos marinos en la reserva faunística Punta Bermeja, son atractivos imperdibles.
Avistaje de aves
La reserva rionegrina de El Cóndor, ubicada en las cercanías del balneario del mismo nombre, es un espacio de importante riqueza de aves del nordeste de la Patagonia, con 164- especies que lo habitan.
Esta reserva alberga, en 12 kilómetros de acantilados, una colonia mixta de nidificación para loros barranqueros, golondrinas y diversas aves rapaces que cumplen funciones esenciales en el mantenimiento de los ecosistemas.
Convertir la reserva en un punto turístico para el avistaje de aves es un modo de proteger la zona ya que El Cóndor puede así aportar de una manera muy significativa en el desarrollo turístico de la región.
Paseo en lanchas entre Viedma y Patagones
Las lanchas, pintorescos barcos que conforman la escenografía de la Comarca, surcan las aguas del río Negro.
Estas embarcaciones cumplen un fin social y de transporte, ya que diariamente interconectan a las dos ciudades con varias frecuencias, para que, quienes deben cruzar el río y cumplir sus obligaciones laborales lo puedan hacer rápidamente y a muy bajo costo.
Primero fueron los pequeñas botes a remo que transportaban gente entre ambas márgenes. Después a mediados del siglo pasado se estableció un servicio regular de lanchas a motor.
Los lancheros, clásicos conductores de estas embarcaciones son cómplices diarios de cada viaje entre ambas márgenes. Escuchan, conocen y cuentan miles de historias ligadas a las costas y su gente. Quizás los cinco minutos que dura el viaje son una buena forma de conectarse con la naturaleza y dejar de lado los problemas cotidianos.
El muelle de lanchas es el sitio característico de la costanera y una postal de la ciudad. Ese lugar que todos
alguna vez eligen para reflejar en una foto y el sitio que los turistas rescatan a través de sus cámaras fotográficas.
Reserva faunística Punta Bermeja
Declarada Reserva Turística Provincial con un régimen de protección integral en el área de la denominada Punta Bermeja, la reserva posee un Centro de Interpretación Faunística que permite al visitante conocer la vida de los lobos marinos, así como observar los principales exponentes de la vida animal y vegetal de la región.
En los altos acantilados, característicos de la costa austral se ha instalado un balcón mirador desde el cual los visitantes pueden apreciar en toda su dimensión la vida de esta nutrida colonia de lobos. Estos mamíferos, durante la mayor parte del año pasan casi todo el tiempo en el mar. Al llegar la primavera los lobos comienzan a reunirse en grupos. Primero llegan los machos y poco después se presentan las hembras que vienen a dar a luz entre noviembre y enero.
Un escenario natural
Playas, acantilados, medaños y un mar azul en toda su dimensión es la experiencia que la costa rionegrina garantiza. Existe una sucesión interminable de atractivos naturales para disfrutar a través de un safari fotográfico y rescatar en imágenes todo lo que su imaginación sugiera. El paisaje está enmarcado en un contexto absolutamente natural en una zona que ofrece amplias posibilidades de vivir las más variada aventura en contacto pleno con la naturaleza.
REVISTA SOL LINEAS AEREAS